Un destilado que dio lugar al mezcal
Hablar sobre el origen del mezcal no es tarea fácil. Hay quienes creen que nace desde tiempos prehispánicos, quienes dicen que llegó desde Filipinas y quienes afirman deriva de un proceso de destilación español. Sin embargo, la historia del mezcal puede tener su inicio en el destilado más antiguo que se produjo en la Nueva España: el vino de cocos.
El vino de cocos es una bebida alcohólica que se obtiene de la destilación de la palma de coco. Para hacerla, se debe cortar el fruto de la palma justo antes de que florezca, machacarla, dejarla fermentar y destilarla. ¿El resultado? Una bebida sabor frutal de entre 35 y 60 grados de alcohol.
En México, el vino de cocos tiene sus primeros registros en el siglo XVII, cuando comerciantes provenientes de Filipinas establecieron en Colima plantaciones de cocos destinadas exclusivamente a la producción de esta bebida. Aunque esta estuvo prohibida durante un tiempo, su popularidad se expandió hasta alcanzar las tierras del centro y sur del país.
Fue en ese choque con otras geografías que su proceso de elaboración cambió, adaptando la bebida a una materia prima característica de las nuevas latitudes: el agave. Con dicha innovación, la Nueva España creó su primera bebida con denominación de origen, el vino de agave, el cual, tras pasar los años, se terminaría por convertir en lo que hoy conocemos como el mezcal.
Bibliografía
- De León Meza, René, “Vino de coco y vino mezcal, una historia comercial conjunta en la época colonial”, Universidad de Guadalajara, 2015.
- Machuca, Paulina, “El vino de cocos en la Nueva España; historia de una transculturación”, El Colegio de Michoacán, 2018.
- “La Tuba. Bebida refrescante con arraigo colimense”, México Desconocido, 26 de mayo 2017.