El arte de tomar mezcal y no caer en el intento

“El mezcal no emborracha, te pone mágico”, cuenta el dicho popular entre los amantes de este destilado. ¿Y cómo negarlo? Si entre sus muchas virtudes tiene un poder que parece demasiado bueno para ser verdad: no da cruda. O al menos no como otras bebidas alcohólicas.

Según el Beverage Testing Institute of Chicago en Illinois, el mezcal es el destilado o alcohol más puro que existe en el planeta y el más noble con el cuerpo humano, característica que viene desde su composición química. Mientras otras bebidas se convierten en azúcares monosacáridos que nuestro hígado debe procesar y eliminar, produciendo ese efecto poco placentero conocido como cruda; el mezcal se convierte en un azúcar polisacárido, el cual, apenas entra en contacto con la boca, comienza a desintegrarse, haciendo que su transformación en el organismo sea mucho más rápida y con menos efectos secundarios. Sin embargo, debemos entender que el mezcal, además de ser mágico, es celoso.

Combinar otras bebidas alcohólicas con el mezcal es un error que se comete de forma común en fiestas o reuniones, haciendo que los  alcoholes puros del mezcal se revuelvan con licores no tan refinados, dando como resultado una resaca terrible al día siguiente. Por eso, si eres de las personas que no les gusta tomar mezcal solo durante toda la noche y en dado momento necesitas un descanso para el paladar, el mejor acompañamiento será un “chaser” de agua con hielo. El agua te ayudará a relajar el paladar y las papilas gustativas, al tiempo que dejará apreciar por más tiempo las notas del mezcal. Vale mencionar también que no es bueno tomar muchos tipos de mezcal en una noche, prueba 2 o 3 y elige uno para continuar durante el resto de la velada, así evitarás ciertos malestares del día siguiente.

Pero, al final del día cada cuerpo es diferente. Existen personas con mayor o menor capacidad para procesar los azúcares de las bebidas alcohólicas y el estado físico o emocional influirá en el resultado final de la experiencia mezcalera. Si ya decidiste combinar tu mezcal con unas cervezas o cocteles, hay un remedio 100% oaxaqueño que te podemos recomendar: el té de poleo.

Este té no solo sirve para quitar la cruda, sino que también es bueno para el estómago y el sistema respiratorio. Además, caliente o helado, te brindará un alivio casi inmediato gracias a su sabor mentolado y refrescante.

Ahora sí, ya sabes cómo pasar una noche al lado de tus cómplices, sin ser víctima de la resaca del día siguiente.